2 agosto, 2011
Coloridas y rústicas
La arquitecta Guadalupe Martiarena dio sus primeros pasos con el cuero en la fábrica de monturas del padre.
Tradición en cuero. Guadalupe Martiarena se recibió de arquitecta aunque siempre le gustaron los trabajos manuales. En la fábrica de monturas del padre, Martiarena comenzó a experimentar con el material. “Argentina tiene una tradición riquísima en cuero. La etapa de aprendizaje fue genial”, recuerda. Hoy, lleva adelante “Pe”, su propio emprendimiento, y hasta exporta al museo Thyssen Bornemisza de Madrid. En sus carteras propone un juego abstracto de morfologías con recursos tomados de la arquitectura y el diseño industrial. Las formas son sintéticas, y resulta evidente que toma al arte como musa inspiradora. Martiarena apuesta a seguir creciendo en el mundo de la marroquinería, un mundo que sin dudas, la recibe con las puertas abiertas.
Contacto: www.peweb.com.ar